Hemos leído en INFORMACIÓN el derribo de uno de los grandes ficus de la plaza del juzgado en Benalúa por la incompetencia de los que hacen las obras, de otro porque lo dañaron y no pudo sostenerse cuando llovió en Semana Santa, de otros dos a los que este tiró. Hoy han empezado una poda que parece una tala, en plena primavera cuando los árboles tienen sus brotes nuevos y acabando con los nidos de los pájaros. Esta tarde al pasar por allí solo se ve cemento, los cuatro palos que han dejado de algún árbol, ni un solo trino de pájaro. Seguro que, durante el día, en lugar de la sombra y el frescor que se notaba, ahora resol y calor. Cuando salga esta carta, probablemente no quedará nada de verde. ¿Qué diría Miguel Hernández, que tiene allí un monumento, al autor del destrozo de nuestro parque?

Fuente: Periodico Informacion